Octubre de 2016

Octubre de 2016

Por Juan Antonio Travieso (*)

Una nueva entrega del Suplemento de Derecho Internacional Público.

Ahora, con el estremecimiento de los ataques terroristas que ponen en jaque a la sensibilidad humana,existe una sensación que se reproduce en el sistema jurídico interno de golpe por golpe.

Es un error poner a la defensa propia en un esquema de seguridad, que lejos de superar los problemas, los agrava.

El compromiso de los hombres y las mujeres del derecho es, precisamente, poner en acción razonamientos en los que el derecho sea el objeto y razón de ser.

Pero además hay otras acciones que se requieren ejecutar. Occidente ha demostrado que es tierra de libertad y cuando ha salido de esa ruta ha generado la más siniestra pesadilla. La lucha por el derecho es también la lucha por la libertad, la igualdad y la educación.

Por tanto, en este número hemos enfocado el Derecho Internacional desde un triple punto de vista, al entremezclar el Código Civil y Comercial con su reforma y sus nexos con los Derechos Humanos y los tratados internacionales. También hemos elegido el camino de la Corte Penal Internacional, para que nadie escape al peso del derecho y, asimismo, hemos puesto en acción un novedoso enfoque dentro del acceso a la educación Universitaria y su autonomía como un emergente para encarar la salida del laberinto.

La solución cómoda es enfrentar los laberintos y las encrucijadas desde planos superficiales. Sin embargo, la verdadera salida para los problemas y conflictos es con la mirada y la intención puestas hacia arriba.